Esta semana, gustosamente cedemos nuestro espacio de blog a Ginebra Sat Karam, quien nos aporta su reflexión más personal sobre la meditación y cómo ha influido en ella. Además, Ginebra nos comparte una excelente práctica de 11 minutos, sencilla e ideal para todas aquellas personas que estéis en el camino de iniciaros con la meditación o bien, en el camino de reforzarla en pequeños espacios de tiempo.
Antes de iniciar su reflexión y práctica, me gustaría presentaros a Ginebra Sat Karam.
"Facialista, osteópata, cantante de mantras, profesora de yoga kundalini y meditación.
Creadora del método exclusivo de belleza energética “Natural Karam”.
Desde niña ha sentido curiosidad por el cuerpo humano y su fascinante complejidad. Especialista en osteopatía integral, quiromasaje, terapias naturales y energéticas.
La meditación, el yoga kundalini y la música, completan su formación y alimentan su vida diaria, su mundo, un mundo conectado por las energías y el continuo estudio de la piel".
Y según comentado, a continuación os comparto su a reflexión personal y práctica en relación a la meditación.
Hablar de conciencia femenina sin tener en cuenta la meditación es prácticamente imposible.
Para poder aceptarnos, perdonarnos, empoderarnos y honrarnos es necesario un trabajo interno, y un buen camino hacia este trabajo puede ser sin duda la meditación.
Hay muchas formas de meditar. Muchas personas piensan que meditar es estar mucho tiempo sentado con las piernas cruzadas, espalda recta, sin pensar en nada y que solo es apto para unos pocos, por su dificultad. Pues os adelanto que no es del todo cierto. Hay meditaciones muy difíciles y otras más fáciles pero todo el mundo puede meditar, ya que hay muchas formas de poder hacerlo.
Meditar es tan fácil y complicado como es estar centrado al cien por cien en algo. En definitiva, ser consciente del momento presente, respirar, comer, escuchar tu cuerpo, bailar…
Todo esto te trae al presente si lo haces en plena consciencia, pero también hay meditaciones enfocadas para dar un resultado específico y esas son las más interesantes.
Reconozco que las que más me gustan son las que me revelan cosas que no conozco de mí y me ayudan a conectarme aún más con mi energía femenina en todo su rango.
A continuación, os comparto una práctica muy agradable, para la que no hace falta experiencia con la que espero que podáis conocer mejor la meditación o reforzar vuestra práctica:
- Busca un lugar tranquilo y cómodo para ti. Puedes poner una vela, música relajante incluso ponerte algún aceite esencial.
- Siéntate con la espalda recta, bien en postura fácil o apoyada en una silla. Si no puedes por algún problema físico también te puedes tumbar en la cama o suelo.
Aquí surge siempre un problema que te puedes quedar dormida, entonces se rompería la meditación.
- Pon tu mano izquierda en el pecho y tu mano derecha en el abdomen. Cierra los ojos llevando la visión al entrecejo, ahora inhala por la nariz y exhala por la boca, inhala por la boca y exhala por la nariz. Sigue así por 11 minutos.
La práctica para mí lo ha sido todo. Cuando miro para atrás y veo en la mujer que me he convertido se lo debo todo a la práctica y al compromiso conmigo misma.
Personalmente me ha aportado muchísimo. A continuación os comparto algunos de sus beneficios desde mi propia experiencia:
- Conocerme mejor como mujer.
- Los ciclos que vivimos son increíbles y si no estás en equilibrio puede ser un tobogán de emociones.
- Apoyo para la adaptación a los cambios que trae la vida.
- Aceptar mi cuerpo y honrarlo.
- Tener confianza en mí.
- Equilibrar mi energía femenina y masculina.
- Ver las cosas con perspectiva y no tomarlas como algo personal.
Si os soy sincera no me veo viviendo otra vida, para mi meditar, cuidar mi cuerpo con comida que me nutra y suba mi vibración, practicar yoga, intentar mirar de frente a mi sombra para poder sacarla a la luz e intentar ser consciente de lo que hago y lo que no, forma parte de mi día a día.
Si nunca meditaste o estas dudando, te animo a que poco a poco lo hagas.
En pocos meses notarás los cambios, te lo garantizo.
Y sobre todo comprométete contigo misma.
Atrévete a ser tu mejor versión.
Esperamos que os haya gustado o de acuerdo al mensaje de Ginebra, os animamos a iniciaros con la meditación, pues sin duda es una práctica excelente para conectar con nosotros y para vivir el presente de una manera más cosciente.
